El que fuera delantero del Real Madrid, donde no llegó a triunfar, ha confesado en una entrevista que sus posibilidades de estar este verano en 'Francia 2016' son muy escasas. «Espero estar, pero sé que tengo una posibilidad entre un millón. El seleccionador quiere jugadores que se sacrifiquen, así que tuve que cambiar mi actitud en los entrenamientos. Si no me llama no lloraré, me iré de vacaciones, animaré a Italia y a Insigne -su amigo y sin embargo competidor por el puesto- desde casa».
Cassano aprovechó su paso por el programa 'tiki taka' para reconocer que su actitud ha perjudicado a su carrera: «Durante los 10 últimos años, la gente ha dicho que yo era un talento desperdiciado. El problema es que me arruiné a mí mismo. Soy perezoso y nunca he hecho nada para dar lo mejor de mi rendimiento, pero en la vida hay que ser feliz y yo lo soy».
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